Deberes y confinamiento, ¿cómo lo gestionamos?
Llevamos varias semanas de confinamiento, intentando compaginar teletrabajo y rutinas diarias, a lo que hay que añadir las tareas escolares de los más pequeños cuando convivimos con niños. No es fácil mantener rutinas y hábitos estos días, y hacerle entender a los niños que no estamos de vacaciones, que es importante hacer los deberes que les van mandando desde el colegio y establecer hábitos que favorezcan su aprendizaje y desarrollo.
¿Qué podemos hacer para evitar conflictos a la hora de hacer los deberes?
Establecer objetivos realistas y asequibles. Es muy difícil que los niños sigan los mismos horarios que tenían en el colegio, hay que ser flexible en este aspecto, y llegar a acuerdos con ellos para evitar que se desmotiven. En lugar de empezar las tareas a las 9 de la mañana, pueden empezar más tarde, acordando una hora límite de finalización.
Informar y anticipar la hora de hacer los deberes. Es recomendable informarles 5 o 10 minutos antes de empezar a hacer los deberes, avisarles de lo que van a hacer para que se preparen psicológicamente.
Fraccionar las tareas. Esto es, darles las tareas de una en una, para que no se agobien viendo todo el trabajo que tienen que hacer. Para favorecer su motivación y concentración, podemos dividir las tareas en 3 grupos según la dificultad que tengan para el niño. Se recomienda empezar por aquellas tareas que tengan una dificultad media, luego las difíciles y terminar por las fáciles.
Dejarles elegir entre varias tareas para disminuir la percepción de que se trata de una obligación.
Plantear tareas a modo de reto, para mejorar su motivación a la hora de realizarlas.
Motivar y reforzar tanto los comportamientos deseados como las aproximaciones a los mismos.
Estos días están siendo complicados, tanto para nosotros como para los más pequeños. Es importante procurar no generar más estresores de los que probablemente ya tenemos. Evitemos los enfrentamientos con los niños en la medida de lo posible, manteniéndonos firmes pero siendo también flexibles, aceptando sus limitaciones e intentando llegar a acuerdos, ya que esto hará que cumplan mejor con sus responsabilidades diarias.
